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Ventajas e inconvenientes de llevarse las TIC de vacaciones

24 de agosto, 2016

Gracias a internet tenemos cantidades ingentes de información sobre cualquier destino. Decidimos nuestros destinos con mayor conocimiento, atrás quedaron las recomendaciones de agencias y turoperadores, ahora contamos con la opinión de otros usuarios.

El móvil agiliza gran parte de las tareas previas a las vacaciones. Hace unos post os contábamos cómo organizar esos días con unos cuantos clics en aplicaciones móviles y webs.

Sin embargo, una vez que toca disfrutar de verdad del momento que llevamos esperando todo el año, ¿podemos sobrevivir sin el dispositivo?

tics-vacaciones

Un estudio realizado por ASUS y recogido en esta infografía muestra que 83% de los españoles considera el móvil parte imprescindible de su equipaje.  Si bien es cierto que el uso que se hace del aparto es diferente al que realizamos durante el resto de año.

infografia uso movil vacaciones

Ventajas de viajar con el Smartphone

Además de las ventajas previas al viaje que ya hemos mencionado. Si en vacaciones salimos de nuestra zona de confort, el móvil nos permite:

  • Consultar todo tipo de información útil, desde la previsión del tiempo hasta localizar un restaurante o museo, etc.
  • Contar con recomendaciones y opiniones de otros usuarios en cualquier momento
  • Ponernos en contacto rápidamente con los familiares en caso de que ocurran imprevistos o emergencias. O si son las primeras vacaciones sin hijos que haces en mucho tiempo y te entra la nostalgia, puedes aprovechar los sistemas de vídeo llamada.
  • Poder tirar de traductores on-line si viajamos al extranjero. Seguro que poner algo en el traductor y señalarlo a nuestro interlocutor nos saca del algún apuro.
  • Acceder a información de interés a través de aplicaciones o códigos QR en nuestras visitas culturales. Saber más sobre autores, historia y técnicas artísticas o arquitectónicas, etc., sin necesidad de aparatosas audioguías y haciendo las visitas en el orden que desees es posible gracias a las TIC.
  • Controlar nuestro hogar gracias a la domótica o revisar sistemas de seguridad a distancia. Cada vez son más los sistemas de alarma y seguridad que nos permiten controlar nuestro hogar desde cualquier punto del globo, facilitando que viajemos con mayor tranquilidad respecto a nuestra vivienda. Lo mismo ocurre si olvidaste regar las plantas e incluso si quieres estar seguro de que tu mascota se encuentra bien, existe una gran oferta de aplicaciones de monitorización y control remoto.
  • Realizar gestiones importantes o inaplazables vía telemática. Si olvidaste una gestión del banco o de alguna administración pública y no tienes más remedio que atenderlo en plenas vacaciones, al menos podrás hacerlo desde el lugar en el que te encuentres, sin tener que aplazar desplazamiento ni cancelar planes.
  • Irnos de vacaciones aunque sea con el trabajo a cuestas. Para aquellos que no se pueden permitir desconectar del todo, los móviles les permiten cambiar de aires y realizar sus tareas desde el otro lado del planeta sin renunciar del todo al ocio.

 

Inconvenientes de no despegarte del móvil

Sin embargo, no renunciar al dispositivo también tiene algunos aspectos negativos:

  • Dificultad para desconectar del trabajo, estudios o proyectos. En general de las obligaciones diarias, ya que posiblemente tengas esas listas de tareas, sincronización del e-mail, grupos de whatsapp de trabajo, etc., en el móvil.
  • Estar más preocupados por el ‘postureo’ que por disfrutar plenamente del destino. Quieres compartir con el mundo lo geniales que están siendo tus vacaciones pero puedes acabar viviéndolas a través del móvil. Vas de concierto y en lugar de disfrutar de la banda y sentir la música te pones a grabar un vídeo, estás en la playa y en lugar de disfrutar del mar y la arena te preocupa el filtro de Instagram que le vas a poner a la foto del atardecer para que parezca que has estado en el Caribe…
  • No hacer caso a tu pareja, familiares o amigos. Las vacaciones son para bajar el ritmo, respirar hondo y disfrutar del tiempo y las personas, las de carne y hueso, que se sientan a 20 cm de ti en la terraza del restaurante. Olvida la foto del plato de comida, por muy bonito que sea, y siéntate a charlar con los que tienes alrededor.
  • Perder capacidad de sorpresa, aventura o experimentación. Por muy útil que sea contar con toda la información, a veces perdemos la capacidad para dejarnos sobrecoger por los lugares a los que viajamos. Parece que ya lo hemos visto todo antes en miles de imágenes por internet.
  • Estar expuestos continuamente a los estímulos que nos mantienen en alerta. Nuestro cerebro necesita oxigenarse, se pasa el año procesando miles de datos e información de todo tipo. Vamos a darle un respiro, no hace falta entrar en encefalograma plano pero sí será bueno no mantenerse en situación de estrés.
  • Dejar en manos del móvil todos los datos del viaje. Lo tenemos todo almacenado en el dispositivo y si lo perdemos o se nos queda sin batería nos quedamos desorientados y perdidos.

Se trata de encontrar el equilibrio y usar el móvil durante unos días solo para lo que realmente es útil, todo lo demás seguramente  puede esperar a la vuelta.

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