> MENU DE NAVEGACIÓN
< CERRAR

La Comunidad de Telecentros reivindica la continuidad de los CAPI de Madrid

7 de abril, 2010

La Asociación Comunidad de Redes de Telecentros celebró ayer, 6 de marzo, la primera reunión de su nueva junta directiva. El lugar escogido para ello, el telecentro madrileño de La Vaguada, no fue casual sino todo lo contrario. El motivo fue reivindicar el importante papel que estos centros públicos cumplen para miles de personas y pedirle a la Comunidad de Madrid que reconsidere su decisión de cerrar los centros CAPI (Centros de Acceso Público a Internet) a su cargo.

El colectivo que agrupa a los telecentros españoles señala que hay que evitar el cierre de estas instalaciones, una circunstancia que provocará el despido de 300 trabajadores y que 500.000 personas no puedan acceder como hasta ahora a la Sociedad de la Información. No hay que olvidar que los usuarios que acceden más a menudo a estos centros son personas desempleadas, jóvenes con pocos recursos, personas mayores y extranjeros. Para muchos de ellos, acceder a los telecentros supone una oportunidad única de formación en herramientas TIC y alfabetización digital, que además aprovechan como recurso para mejorar sus capacidades profesionales y buscar empleo. Con el cierre de estos telecentros se dejarán de realizar 10.000 actividades formativas, según cálculos del colectivo, unas actividades que además cuentan con una importante lista de espera.

La Asociación de Telecentros quiere poner en valor el trabajo y la utilidad social de este tipo de instalaciones, que consiguen importantes logros como viene demostrando el proyecto Guadalinfo en Andalucía en el último lustro. En el caso concreto de la Comunidad de Madrid la brecha digital entre hombre y mujeres se ha invertido gracias al trabajo de los telecentros. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística de 2009, en los municipios menores de 10.000 habitantes (donde están la mayoría de centros que se quiere cerrar) las mujeres que acceden a Internet superan en un 9% a los hombres, mientras que la media nacional es de un 5% a favor de éstos.

Además, los telecentros no cumplen sólo una labor de alfabetización digital y formación en nuevas tecnologías, ya que en los últimos años van más allá y se están convirtiendo en auténticos centros de innovación. Tenemos el ejemplo conocido de los centros Guadalinfo y sus proyectos impulsados por ciudadanos, con más de 750 nodos físicos repartidos por toda la Comunidad Autónoma. Pero además en España hay otros claros exponentes como el Citilab en Cataluña, KZGunea en Euskadi, o los Centros de Conocimiento de Extremadura, entre otros. El papel de la ciudadanía y su participación real son clave en este nuevo rol de los centros de conocimiento e innovación.

Por todo ello los telecentros son necesarios hoy más que nunca, para seguir afianzando su papel en la ciudadanía y trabajando en nuevas formas de investigación social. El cierre de centros en Madrid sólo supondría un perjuicio para sus cientos de miles de usuarios y un freno para que accedan de lleno a la Sociedad de la Información.

Deja tu comentario