Emilio J. Domínguez Rovira (Fuente Palmera, Córdoba): «Ser de utilidad es un acicate para seguir queriendo crecer en tu trabajo»

Inmersos en el año Guadalinfo y la campaña 15 años contigo, cada semana vamos a conocer las opiniones de un/a Agente de Innovación Local sobre la evolución del proyecto y de su trabajo en el centro. Esto es “De primera mano, y hoy hablamos con Emilio J. Domínguez del  Centro Guadalinfo de Fuente Palmera.

• Centro Guadalinfo Fuente Palmera (Córdoba)
• Nombre: Emilio J. Domínguez Rovira
• Fecha de incorporación a Guadalinfo: 2009

• Lo mejor que te ha aportado Guadalinfo: Conocer mejor mi entorno, adquirir habilidades sociales, mejorar y ampliar mis competencias informáticas-administrativas, dar a conocer mis aptitudes, conocer un grupo de gente estupenda tanto compañeros de trabajo como usuario/vecinos de la localidad.
• Lo que más te ha sorprendido: la versatilidad del proyecto y de la gente que lo integran; el rol tan distinto que tiene cada dinamizador y las acciones que llevan a cabo para satisfacer las necesidades de sus usuarios; el talento existente de mis compañeros; el aprecio de la gente cuando los ayudas; los conocimientos que se pueden adquirir y las formas de hacerlo.
• Principales cambios que has observado en la evolución del proyecto: Al principio el usuario estaba en el centro de las acciones, luego hubo una etapa en la que la consecución de objetivos (europeos) era lo más importante en detrimento del usuario, y en la actualidad los cambios vuelven a situar de nuevo, poco a poco, al usuario en el foco, sobre todo al binomio usuario- NNTT. Las necesidades de los usuarios han variado de un perfil más cándido de alfabetización digital en una época en la que el acceso a las NNTT era incipiente, hacia un perfil más integrado en las mismas y en el que se destaca la necesidad de comunicación electrónica con las administraciones y la adaptación a distintas herramientas tecnológicas que van surgiendo. Al principio había necesidad de cubrir la “brecha digital” y satisfacer el acceso a la red, con lo cual la ecuación era más sencilla y el dinamizador podía sacar tiempo para explotar su faceta más creativa con actividades secundarias que resaltaban valores como la cercanía, la fidelización, el ocio, etc. Ahora, tras pasar una etapa de objetivos impuestos por los cánones europeos (lógico, el que pagaba decía en lo que se tenía que invertir) nos encontramos en un cambio constante, donde el usuario final cuenta con conexión a Internet en su casa e incluso en su móvil, con lo que han ganado peso actividades que ponen en el centro tanto al usuario como al dinamizador, del que hay más dependencia: más atención personalizada, más ayuda a trámites, más acompañamientos al usuario. Hay más posibilidades o incluso necesidad de trabajar con otros colectivos de la localidad debido al alto peso de la e-administración impuesto por las instituciones y posibilitado por los avances en las herramientas TIC.

• Valores que destacas del proyecto para el usuario:
  Personalización, fidelización, cercanía, polivalencia del proyecto, conocimiento de su realidad, elasticidad, ergonomía, etc. Somos una administración que permeabiliza las fisuras de las distintas
  onstituciones, actuamos de engranaje entre ellas y el usuario, somos el perro lazarillo que ayuda al usuario en su trato con las NNTT-TIC-Administraciones Electrónicas.
• Cualidades que para ti debe tener un AIL: polivalente, afable, ser capaz de ser autónomo en su trabajo (autogestionar un centrocuyas labores en cualquier academia llevarían entre varias personas), conocer o aprender la realidad de su entorno, tener iniciativa para aprovechar las herramientas de las que proveen Junta-Diputación-Consorcio y abanderar proyectos que sumen
  valor a su localidad, capacidad de trabajo en equipo (DL-DT), y capacidad de aprendizaje/adaptación en su trabajo.
• Describe un recuerdo/anécdota/curiosidad/momento importante en tu trayectoria: Nada más llegar al proyecto Guadalinfo tuve que enseñar a un par de chicas de nacionalidad rumana a aprender español. Fue ahí donde me di cuenta de que mi trabajo no sería calentar la silla de un telecentro al uso, sino que tendría que remangarme y aprovechar la oportunidad que me brindaba tener que ser un chico-para-todo. Desde entonces he adquirido competencias que han sido de utilidad para mis vecinos, pero también para mi desarrollo personal. Todo aquel que tiene la ocasión de acompañarme en el trabajo un tiempo (usuarios tractores, estudiantes de prácticas, etc.) coincide en que “no te aburres”, “tienes que hacer de todo”, “vaya cosas raras que te pide la gente”, “qué gran labor haces”, “Guadalinfo no puede faltar”. Ser de utilidad es un acicate para seguir queriendo crecer en tu trabajo. También recuerdo con cariño otros momentos como la primera vez que tuve que afrontar formación para invidentes (aún hoy seguimos con Juan Emilio, usuario ONCE tras muchos años), elaborar eventos para la localidad en comandita con instituciones locales, presentar libros, trabajar con técnicos de juventud, igualdad, inmigración, etc., dar charlas a padres, hacerme cargo junto con compañeros del ayto de la organización de la expedición del DNI en la localidad, expedir más de 1.000 certificados digitales FNMT anuales, visitar pueblos de toda la provincia en las reuniones de dinamizadores así como a los encuentros anuales, recibir el reconocimiento y gratitud de muchos de los vecinos que tengo el placer de atender, elaborar proyectos propios del centro orientados a la localidad lo que me ha permitido conocerla mejor así como a sus gentes, conocer gente de todas las nacionalidades, trabajar con la residencia IEMAKAIE, recibir formación valiosa de manera inmediata que de otra manera me hubiera costado muchos recursos conseguir, etc. Confidente pasajero, vecino diario de pantalla, cicerone TIC, “paleo-influencer” (nosotros sí que hemos tenido la ocasión de ser un referente para parte de nuestros vecinos antes del boom de los youtubers, blogueros, etc.), caras públicas bajadas del pedestal de la administración trabajando codo a codo con el ciudadano, gestores de centros coworking donde a diario el ágora en el que se convierte el centro se llena de vecinos que salen con una sonrisa en la cara (risa que se contagia al dinamizador), etc.