TIC y violencia, una relación a combatir
El 70% de los jóvenes asegura haber recibido mensajes con insultos alguna vez, el 67,1 de las chicas reconoce haber sido víctima de violencia de género a través de las nuevas tecnologías y cerca del 40% ha recibido algún mensaje que le ha hecho “sentir miedo”. Con estos datos estadísticos es evidente que queda mucho por hacer. La Universidad Pablo de Olvide de Sevilla aborda en un curso de verano la violencia filioparental, y la red Guadalinfo está presente a través del dinamizador territorial de Sevilla Fernando García Cumbreras y Antonio David García Pérez, agente de innovación del centro Guadalinfo de Lora del Río (Sevilla). Ambos exponen la relación existente entre nuevas tecnologías y violencia.
El acoso en la red es un problema creciente como también la tolerancia al respecto de los adolescentes, ya que, según los datos expuestos por los dos especialistas, el 28,1% de los chicos no considera conducta de riesgo responder a un mensaje en el que son insultados.
La educación, sin duda, juega aquí un papel fundamental y con la firme creencia del poder transformador que esta tiene, se plantea el curso para implicar en la educación a todos los ámbitos: individual, familiar, social, profesional y comunitario.
Las múltiples posibilidades que ofrece la red pueden convertirse en un arma peligrosa si el uso no es el adecuado. El falso anonimato, las posibilidades de contar con prácticamente un estudio de televisión en el bolsillo con el teléfono móvil, la instantaneidad de las acciones, la falta de maduración de mucho jóvenes y el acceso universal, libre y gratuito son elementos sobre los que hay que formar para un uso responsable, según han expuesto en la conferencia los expertos de la red Guadalinfo.
La facilidad para hacer daño, ayudada por un alto grado de impunidad y las dificultades para mantener la privacidad se unen en los casos de ciberviolencia de género. El agresor puede mantener contacto permanente con la víctima, en forma de control, a través de smartphones, redes sociales y Apps de mensajería instantánea.
La violencia contra las mujeres por medio de internet y otras TIC puede ser con insultos y desprecios en redes sociales, chats, blogs, emails, webs, etc. En ocasiones, la escalada de un enfrentamiento online a violencia física real se produce en poco tiempo. Amenazas, coacciones y otros ciberdelitos semejantes se producen online cada vez con más asiduidad.
Pero estos casos no son los únicos que preocupan y que aumentan en la sociedad. La relación entre nuevas tecnologías y violencia va más allá con casos como el ciberbullying que es el uso de los medios telemáticos (Internet, telefonía móvil y videojuegos online principalmente) para ejercer el acoso psicológico entre iguales. No se trata aquí el acoso o abuso de índole estrictamente sexual ni los casos en los que personas adultas intervienen.
Los especialistas, que pusieron hace unos años en marcha ‘Protego’, un proyecto de los centros de Sevilla de la Red Guadalinfo de Andalucía que trata de captar y resolver los diversos delitos de acoso contra la integridad y la privacidad de las personas en la red, alertan también del grooming de menores en Internet, que es un fenómeno que se puede traducir como engatusamiento y que se utiliza para describir las prácticas online de ciertos adultos para ganarse la confianza de un (o una) menor fingiendo empatía, cariño, etc. con fines de satisfacción sexual (como mínimo, y casi siempre, obtener imágenes del/a menor desnudo/a o realizando actos sexuales).
El sexting consiste en el envío de contenidos de tipo sexual (principalmente fotografías y/o vídeos) producidos generalmente por el propio remitente, a otras personas por medio de teléfonos móviles. La sextorsión tiene su origen en el chantaje realizado a partir de la posesión por parte del chantajista de una imagen íntima.
Además de todos los ciberdelitos, cuya lista crece a medida que se extiende el uso de internet, los ponentes también abordaron el problema de las tecnoadicciones o ciberadicciones sobre el que la educación tiene un papel fundamental. Se refieren a todos fenómenos o problemas de abuso de las NTIC, frecuentemente a la adicción a Interent, adicción a los teléfonos móviles (incluyendo p.ej. la adicción a los SMSs) y a la adicción a los videojuegos (incluyendo cada vez más los videojuegos online). La formación e información son cada vez más imprescindibles.
Protego
El proyecto Protego es una idea original del centro Guadalinfo de Marchena, a la que se han ido sumando otros centros de la red Guadalinfo en la provincia de Sevilla como Lora del Río, Gines, Alcalá del Río, Constantina y San Nicolás del Puerto.
El proyecto Protego se gestó ante la necesidad creada por la abundante aparición de casos de delitos contra la integridad y privacidad de los usuarios de internet y diferentes redes sociales en general, y tiene como objetivo principal, a través de acciones de orientación, formación e información, ayudar a los usuarios que en muchas ocasiones no saben cómo actuar ante estos casos, y poner en su conocimiento las pautas más adecuadas para resolver cualquier tipo de amenaza, en tiempo y forma satisfactorias.
Con este proyecto, la red de Centros Guadalinfo ha dado un paso más en la generación de una acción social de carácter innovador.
Este proyecto contempla la necesidad de coordinar y crear un entorno de trabajo colaborativo de profesionales, que de forma interdisciplinar podamos dar un servicio de calidad al colectivo afectado de estas situaciones.
Así, la red de Centros Guadalinfo trabaja codo con codo con agentes de los servicios sociales locales y de la Unidad de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil, para la difusión, formación y prevención, y tratamiento de los casos.
Este programa establece que cada caso será tratado estableciendo unas pautas a seguir, definidas en un protocolo de actuación diseñado por el equipo, ajustándose a un tratamiento de cada caso según el tipo de delito, problema derivado del mismo y necesidades del usuario.